La fiscal Florencia Gómez, titular de la Fiscalía Ambiental y contra el Maltrato Animal, advirtió sobre el crecimiento del tráfico ilegal de fauna silvestre en la provincia de Chubut y remarcó que su comercialización constituye un delito penal.
“La fauna silvestre no es una mascota: es un delito su comercialización”, expresó con firmeza la fiscal, quien encabeza investigaciones en coordinación con otras provincias para desarticular redes de tráfico de especies protegidas.
Un negocio millonario y cruel
Gómez explicó que el tráfico de animales silvestres es un negocio millonario a nivel mundial, pero que se sostiene sobre prácticas extremadamente crueles. “Muchos animales mueren antes de llegar a destino, estresados y escondidos. Son especies sumamente protegidas, algunas en peligro de extinción”, señaló.
Además, advirtió que adquirir estos animales no solo es ilegal, sino que representa un riesgo para la salud pública y el equilibrio ecológico. “La gente debe entender que comprar un animal silvestre es comprar un problema, porque está prohibido por ley”, sostuvo.
El rol clave de la comunidad
La fiscal destacó la importancia de la participación ciudadana en la lucha contra este delito. “Gracias al vecino que se anima a denunciar podemos intervenir. La identidad de cada denunciante es resguardada en todo momento”, aseguró.
Las investigaciones en curso buscan identificar a los responsables de la captura, transporte y venta de animales silvestres en la región, en un esfuerzo conjunto entre fiscalías, fuerzas de seguridad y organismos ambientales.